La regulación sirve para proteger la salud ante los riesgos de enfermedades respiratorias y cardiovasculares por la contaminación.
CIUDAD DE MÉXICO (EFE).- Las urbes mexicanas de más de 500 mil habitantes deberán "monitorear sistemáticamente" la calidad del aire que respiran sus habitantes para "proteger su salud ante los riesgos de enfermedades respiratorias y cardiovasculares asociadas a la contaminación", que causan 14 mil 700 muertes al año en el país.
Así lo señalaron hoy varias ONG mexicanas en un comunicado en el que "exhortaron a las autoridades locales y federales a tomar medidas inmediatas que permitan garantizar el cumplimiento efectivo de esta norma, en beneficio de la salud de 55 millones de mexicanos".
El pasado 16 de junio fue publicada en el Diario Oficial de la Federación (DOF) la Norma Oficial 156 (NOM 156), que obliga a esas ciudades a "especificar las condiciones mínimas que deben ser observadas para el establecimiento y operación de sistemas de monitoreo de la calidad del aire".
Las ONG recordaron que "la exposición crónica a la contaminación del aire se asocia con el incremento de problemas cardiovasculares y respiratorios como la bronquitis y el asma", así como con varios tipos de cáncer, nacimientos prematuros, retraso en el crecimiento intrauterino, bajo peso al nacer y el "síndrome de muerte temprana".
La medida afectará en principio a 34 grandes ciudades mexicanas que deberán detallar la calidad del aire que respira la gente.
Entre las que carecen de estos sistemas destacan Puebla, la capital de Baja California, Mexicali, así como la del Estado de México, Toluca, y su zona metropolitana.
"Veracruz es la zona metropolitana con mayor rezago en adoptar medidas para cumplir con la nueva norma oficial", agregaron las organizaciones.
Otras poblaciones que deberán medir mejor su aire son Acapulco, Cancún, Chihuahua, Ciudad Juárez, Cuernavaca, Culiacán, Durango, Hermosillo, Irapuato, Torreón, León, Mérida, Pachuca, Querétaro, San Luis Potosí, Tampico, y Tuxtla Gutiérrez.
"Estas ciudades no cuentan con suficiente equipo de monitoreo ni con respaldo técnico, presentan vacíos de información, fallas en la validación de los registros y la comunicación a la ciudadanía es nula", señalaron las organizaciones.
La mayoría de las urbes que deben acatar esta norma "requieren de soporte técnico y financiero" del Gobierno federal "para poder obtener registros confiables y comunicarlos en forma eficiente y oportuna a la población", apuntaron.
Hasta ahora, agregaron, "solo el Valle de México (donde está la capital del país), Guadalajara y Monterrey monitorean en forma consistente" las emisiones de partículas y gases contaminantes a la atmósfera.
El comunicado está firmado por la Red Nacional de Ciclismo Urbano (BiciRed), la ONG El Poder del Consumidor, la Fundación Tláloc, la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM) y el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
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