La madrugada del domingo, a las 00:19 horas se registró un sismo de 5.8 grados Richter, con epicentro a 30 kilómetros de Huitzuco, Guerrero. Pero si fue de magnitud 5.8, ¿por qué se sintió tan fuerte en el Distrito Federal?
Muchos de los sismos que se perciben en la Ciudad de México tienen como zona epicentral la costa de Jalisco, Michoacán, Guerrero o Oaxaca. Por ejemplo, Pinotepa Nacional, Oaxaca, está a 330 kilómetros del DF.
El epicentro del sismo registrado la madrugada del domingo fue en Huitzuco, Guerrero, a 140 kilómetros de la ciudad.
Víctor Hugo Espíndola, del Servicio Sismológico Nacional, dice que este sismo "ocurrió más cercano a la Ciudad de México y sus efectos sobre la población son mayores, este tipo de sismos que son más cercanos y profundos los sentimos mejor en esta región de los volcanes y en la zona del centro".
Los sismos con epicentro en la zona costera son más oscilatorios que trepidatorios, por lo que los percibimos menos agresivos.
La fricción de las placas tectónicas Norteamericana, donde se encuentra el territorio del país, y la de Cocos, donde se encuentra el Océano Pacífico, provoca liberación de energía en forma vertical por lo que el movimiento es trepidatorio y lo sentimos más agresivo.
Victor Hugo Espíndola dice que "esas ondas llegan rápidamente a la Ciudad de México, como están muy cerquita son las que sentimos como trepidatorio, entonces están cerca, están profundas y nosotros sentimos el jalón y después sentimos un poquito el onduleo por esa onda transversal".
Además, por lo general, los sismos tienen profundidades de 15 kilómetros. Éste fue de 60, cuatro veces más profundo.
Por la magnitud, es común según los sismógrafos, que no se registren numerosas réplicas: toda la energía acumulada es liberada de un solo golpe.
En las 13 horas posteriores al sismo, el Servicio Sismológico Nacional registró dos réplicas: la más fuerte, de magnitud 3.6 a las 12:25 del día.
Sin embargo, es alta la probabilidad de que se genere otro sismo en alguna zona aledaña y por tanto también cercana a la Ciudad de México.
El saldo de este sismo fue blanco, sin embargo los primeros minutos posteriores al sismo fueron cruciales para algunas personas: el Heroico Cuerpo de Bomberos llegó al edificio Ignacio Ramírez, de la Unidad Habitacional Nonoalco Tlatelolco. Había recibido el reporte de una persona atrapada en el elevador.
De forma manual, los bomberos movieron las cuerdas del elevador para que bajara al piso 6 y saliera la persona. Al momento de abrir la puerta se dieron cuenta de que no era una persona, eran siete.
Jóvenes de entre 17 y 18 años. Se dirigían al departamento de uno de ellos cuando comenzó a temblar, se fue la luz y se atoró el elevador.
Michel Téllez, vecino de Tlatelolco, dice que iban "a la casa de un amigo, y en eso ya cuando ya íbamos bajando; se atoró".
Conforme pasaron las horas fue restablecido el suministro eléctrico en las colonias afectadas. En la colonia Ángel Zimbrón de la delegación Azcapotzalco, se derrumbó una barda.
Operan con normalidad las instalaciones de la Comisión Federal de Electricidad, del Sistema de Aguas de la Ciudad de México, del Sistema de Transporte Colectivo Metro, así como el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y el Sistema de Transportes Eléctricos.
En Guerrero, se registraron derrumbes y daños menores en los municipios de Taxco, Iguala y Chilpancingo.
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